martes, 28 de julio de 2015

LA ABUNDANCIA DE JESUS





Vivimos momentos difíciles en el mundo porque hemos olvidado las recomendaciones del Maestro.  La sociedad se debate dentro de sus propias injusticias porque ha querido llevar adelante su forma de pensar, pasando por alto que vive en un mundo que le pertenece al Creador, quien ha dictado las leyes correspondientes para vivir en paz, justicia y felicidad.

Obstinados en la propia sabiduría humana, los hombres insisten en querer encontrar en sus filosofías, soluciones que nunca llegan y que por el contrario alejan al hombre de la verdadera vida que Dios ha dispuesto para el ser humano.  Ahora bien:  ¿Cómo salimos de esta situación de incertidumbre y fracaso?
Si Dios es el creador de la vida, debemos ver que es lo que Él ha planeado para cada ser humano.  Dios no quiere fracasos, no quiere injusticias, no quiere abusos, no quiere corrupción. Dios nos ofrece paz, felicidad, armonía, amor, bienestar, pero para que eso sea posible el hombre debe abandonar su obstinado propósito de querer guiarse por sus propios pensamientos.

No necesitamos ser demasiado instruidos para darnos cuenta que si queremos que el mundo restablezca la paz y la justicia, lo que nos lleva a ser felices, debemos recurrir a la Palabra de Dios, el reglamento para vivir de acuerdo al Plan de Dios en este mundo, y obedecer sus mandamientos y ordenanzas.
Cuando Jesús estuvo desarrollando su ministerio en la tierra, dijo a quienes les seguían algo trascendente: “Yo he venido para que tengan vida y la tengan en abundancia” (Juan 10:10).

 ¿Has conseguido esa vida abundante?
 ¿Es ella una realidad en tu vida?
 ¿Es ella una realidad en tu hogar?
 ¿Sientes que las palabras del Maestro han impactado tu vida y te han dado una fuerza efectiva para vivir en la abundancia que Él ofrece?

Dios tiene el poder para darnos más bendiciones de las que necesitamos para que siempre tengamos lo suficiente para nosotros y también para que podamos  ayudar generosamente a toda buena causa.

Pastor Gregorio García

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